miércoles, 9 de marzo de 2011

Yo de mayor...

Mi trabajo muchas veces me brinda oportunidades únicas de conocer a personas únicas. No por ser excesivamente especiales, casi siempre es gente corriente pero que me hace pensar.
Un caso ha sido un grupo de ancianos (aunque esta palabra no va nada con ellos) que son socios de un casal del Baix Guinardó.
Cuando llegué al centro pensaba que me iba a encontrar a los típicos abuelos jugando a las cartas o al dominó o corrillos de hombres y mujeres debatiendo sobre la vida. Pero no, la vejez también ha cambiado y ha evolucionado y, al verlos, me quedó claro que cuando me llegue el momento, mientras pueda, seré como ellos. Es decir, activos, alegres, implicados.
El centro acoge decenas de talleres: informática, pintura, guitarra, idiomas, cocina, gimnasia, manualidades, talleres para ejercitar la memoria y muchas conferencias. Y la mayoría de los talleres impartidos por los propios socios. Después de una vida de trabajo, de formación, ahora les ha llegado el momento de hacer actividades por puro placer y, encima, compartir sus conocimientos con otros compañeros y llenarse mutuamente de estímulos.
Ojalá nosotros, los jóvenes de hoy, también podamos disfrutar de una vejez digna. De las pensiones no voy a hacer ningún comentario :P